Fuente: (ANSA). MRZEl presidente venezolano, Hugo Chávez, afirmó hoy que su visita a Venecia sirvió "para alimentar el espíritu de comunicación entre el pueblo italiano y el venezolano", en medio de fuertes críticas del centro derecha oficialista y de la oposición democristiana tras la recepción triunfal que le fue brindada en la Muestra del Cine.
Chávez hizo declaraciones a su partida del Lido de Venecia, donde ayer 7 de septiembre en el Palacio del Cine presenció el estreno (fuera de concurso) del film documental de Oliver Stone "South of the border", dedicado en gran parte al mandatario venezolano.
"Lo dije al presidente Giorgio Napolitano y se lo decía al ex premier Romano Prodi, agregó, independientemente de nuestra ideología política, tenemos que fomentar la comunicación entre nuestros dos pueblos", afirmó el mandatario venezolano.
Según Chávez, hay muchas semejanzas entre los dos países: "en Venezuela hay miles de italianos, también el ministro de Economía y el de Salud son italianos, prosiguió, el primero es hijo de Primo Giordani, de la brigada internacional Giuseppe Garibaldi". "También yo estoy a favor de Garibaldi, que era un gran admirador de Simón Bolivar", agregó.
El presidente venezolano agradeció también al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, la ayuda que le brindó "para venir a Venecia, por la seguridad y hospitalidad recibida", antes de partir de Italia.
Chávez y su comitiva se trasladaron a Bielorrusia, tras haber asistido a la proyección del documental del norteamericano Stone, centrado en su figura, en ocasión de la 66 edición del Festival de Cine de la ciudad lagunar.
Rodeado de guardaespaldas y firmando autógrafos como si de una estrella cinematográfica se tratara, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, irrumpió ayer en la 66ª Mostra de Venecia. Su desembarco tenía como objetivo asistir al estreno del documental 'South of the Border', dirigido por el estadounidense Oliver Stone.
Fue precisamente el cineasta quien invitó a la gala al controvertido mandatario, que es protagonista de la cinta, en la que también aparecen dirigentes izquierdistas latinoamericanos como el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, el ecuatoriano Rafael Correa, el boliviano Evo Morales, el paraguayo Fernando Lugo y la argentina Cristina Fernández.
Chávez no tuvo reparos en posar junto a Stone en la alfombra roja y bromear con la prensa acreditada en el prestigioso festival italiano, aunque tampoco se olvidó de sus ya habituales declaraciones grandilocuentes. «Lo que está ocurriendo en Latinoamérica es como un renacimiento», proclamó ante los reporteros.
Lo cierto es que la llegada del presidente venezolano sorprendió a propios y extraños, ya que no había sido anunciada por la organización. Hugo Chávez llegó a bordo de un avión Falcon procedente de Turkmenistán, donde por la mañana se había entrevistado en Ashjabad con su colega turcomano, Gurbangulí Berdimujammédov.
Oliver Stone no se limitó a departir animadamente con su invitado, sino que mostró su admiración por el líder sudamericano. El director estadounidense criticó incluso a los medios de comunicación norteamericanos por «demonizar» a los gobernantes latinoamericanos de izquierdas y defendió su carácter contestatario con Washington.
Su documental, de hecho, representa a Chávez como un héroe del pueblo: «No quería hacer una película sobre los ataques de los medios, era algo muy pequeño para lo que representa este hombre. Este hombre es un fenómeno». El estadounidense se mostró convencido de que el mundo necesita «decenas de Hugo Chávez».
Es decir, dirigentes «comprometidos» con sus votantes. En una entrevista con un reducido grupo de periodistas, Stone defendió la política del mandatario venezolano, su disciplina y su honestidad. «En Europa se necesita gente disciplinada y que hagan lo que prometen, como él».
Si algo quedó claro del discurso del realizador es que es un rendido seguidor del venezolano y tanto en el documental que presentó ayer en la Mostra como en persona no tiene más que palabras positivas para él. Nada de críticas ni reproches, pese a las polémicas que le rodean continuamente.
De la falta de libertad de expresión que denuncian a menudo los medios de comunicación y la oposición venezolana aseguró que no es cierta. «Si vas a Venezuela, el 80 o casi el 90% de los medios están en contra de Chávez . Dicen cosas muy duras sobre él y lo permite, no castiga a esas personas y están aún ahí». Es más, Stone sostuvo que, por ejemplo, en Estados Unidos «eso no pasaría».
Unidos contra Uribe
Sobre los desencuentros de Chávez con otros países de la región, como Colombia, dijo que se deben a su alejamiento de «la visión unilateral» del mundo dominado por Estados Unidos.
Stone hizo también hincapié en las críticas «desmesuradas» de los medios de comunicación extranjeros, especialmente los estadounidenses, contra Chávez y el doble rasero que tienen con otros países sudamericanos.
«Si un solo sindicalista fuera asesinado en Venezuela, saldría en primera pagina del 'New York Times', mientras que eso ocurre en Colombia muy a menudo y nadie dice nada», se quejó. Porque en la medida en que Stone admira a Chávez , muestra su rechazo al presidente colombiano, Álvaro Uribe, al que califica de «una de las fuerzas demoníacas en Latinoamérica» y todo porque «Colombia necesita a América».